Te recuerdo bajita, tímida, delicada,dulce, cariñosa, perfecta dueña de casa y algo insegura. No te pude decir vieja linda ya que nos separamos, tú con 36 y yo con 14.
Dura tarea crecer sin tu apoyo, tu amor y tu guía!!!
Cuando más te extrañé fue al tener mi primera hija; se me hizo patente la orfandad y me sentí sin saber que hacer con esa criatura en mis brazos. Lloré un día completo, me sentí desolada y muy perdida. Cuanto habría dado por tener un consejo, una palabra de aliento y un abrazo tuyo.
Difícil ser madre sin poder tener tu apoyo y compañía. Es andar a tientas, adivinando como caminar con esa responsabilidad.
Pero, al parecer te hiciste presente, no se cómo, cuando ni donde, pero logré la paz que solo las madres saben brindar. Luego saqué la tarea de criar a mis cuatro hijos.
Cuando superaron los 14 años, tampoco sabía como actuar con ellos. Me sentía insegura respecto a que conductas permitir y cuales reprimir. Me faltó un patrón, una imágen. Me costó mucho decirles "no". Trataba siempre de conversar con ellos y que entendieran. El "no" me parecía que nunca te lo escuché.
La vida, a ratos, se siente vacía, te acompaña un sin sentido y un silencio en que lo único que desearía es volver a escuchar tu voz.
Madre, ya se que nunca te apartaste de mi lado, que siempre me cuidas y me acompañas. Soy yo la que no escucha y no te siente.
Estoy segura que ser madre es para siempre, mucho más allá de esta existencia, son lazos eternos que se imprimen en el alma.
También se que yo te elegí para venir a este mundo y, por tanto, no tengo nada que reclamar respecto a tu partida, ya que seguro que también lo sabía.
Crecer sin ti, claro que fue muy duro, pero estoy segura que fue el motor que generó en mi el ser que soy.
Honro el haberte tenido y Honro el haberte perdido. Nos separamos sabiendo que era bueno para las dos y que así yo podría desplegar las alas que me permitieron recorrer todos los caminos que me condujeron hasta aquí y ser quien soy.
Madre, no sientas pena, yo te quiero porque me enseñaste a ser mujer, a darlo todo por el bien de los demás y a servir sin esperar nada. Así te recuerdo y eso lo llevo grabado en el alma.
Madre, tenías una carita feliz. Una sonrisa que te llenaba el rostro y una bondad que te hacía tan querible.
Hoy te siento a mi lado.
Hoy eres mi cómplice y mi confidente.
Hoy te digo que te quiero hasta el infinito y que algún día nos volveremos a reconocer.
Tu hija.
En este blog quiero ir compartiendo mi desarrollo personal, vivencias, aprendizajes, encuentros, dolores, alegrías, la vida.
viernes, octubre 31, 2014
jueves, octubre 30, 2014
Mi peculiar manera de vivir
Tomar decisiones es un acto de valentía. Se requiere saber renunciar a algunas cosas, para ganar otras y no siempre se tolera bien la renuncia, sobretodo cuando implica afectos y distancias.
Hay que saber ganar y saber perder y para ello es necesario estar muy centrado y con un buen equilibrio personal.
En mi vida he tenido que tomar duras decisiones; una de ellas es vivir fuera de mi país, de mis raíces, mis afectos y mi historia. Difícil opción el irse atrás del hombre que amo y construir un hogar en donde no te conoce ni el gato.
En el camino he aprendido que el hogar es el lugar que uno habita y que está en uno generar los espacios cálidos que se precisan para que el día a día sea satisfactorio.
También he aprendido a confiar que lo que construí alguna vez, no se destruye por el hecho de no estar físicamente presente. Este es el concepto de permanencia de objeto que lo tenemos desde muy pequeños. Sin embargo, a veces nos inundamos de esos pensamientos raros que nos llevan a sentir que los otros dejan de hacernos espacio en sus vidas por el hecho de no estar en cuerpo presentes.
Lo más difícil es estar lejos de mis cuatro amores, mis hijos. Es así que cada mes tomo el avión y vuelo a estar con ellos!!!!! Me he dado cuenta que no pueden pasar más de veinte días sin verlos ya que comienzo a inundarme de un sentimiento de angustia y "saudades" que me quitan la respiración.
Pero, también he aprendido a estar muy presente cada día, no me lo paso pensando en estar del otro lado de la cordillera, todo lo contrario, me vivo el día a día intensamente y sacando el mayor provecho posible a este lado.
También extraño a mi familia de origen, a mi viejo querido y mis hermanos........Con mi hermana tenemos una relación de mellizas, de esas sin palabras, que dan para otra entrada de blog.
Mis amigas son todo un tema.......las de aquí y las de allá, son entrañables, son hermanas en la vida y hacen que mi existencia sea multicolor. Le ponen la sal y la pimienta al diario vivir. Tanto aquí como allá generamos esos encuentros femeninos que nos hacen reconocernos y disfrutarnos como solo las mujeres sabemos hacerlo.
Esta peculiar manera de vivir, el porque vivo en dos lugares. es por la vivencia de haberme topado con mi alma gemela en esta existencia es lo que me ha llevado a renunciar hechar raíces en mi patria.
Cuando me preguntan porqué vivo en Montevideo, les digo "por amor".......y es así de simple y claro.
Decidí venirme por lo que este hombre despertó en mi el día que lo conocí. Al mirarnos sabíamos que esto era potente, sutil, mágico y eterno. También sabíamos que tendríamos que sortear muchas aguas para llegar a puerto y nadie nos dijo que sería fácil. Pero, sentía que valía la pena, que había que jugársela y aquí estoy.
Han pasado casi 8 años desde que nos conocimos. Ya son 5 años de feliz matrimonio y 2 años desde que estoy más tiempo instalada en su patria.
Puedo afirmar, con total certeza que mi decisión fue acertada y que la vida se ha encargado de afianzar y nutrir este vínculo para beneficio de la familia completa. Nuestros 8 hijos tienen mejores padres, seres más felices y plenos, que tienen su propia vida y no somos carga afectiva para ellos.
Somos un mejor ejemplo de seres humanos, conectados con nuestro sentir y gozando la vida, aunque a veces el sol se esconda y el frío inunda nuestras almas. Nos tenemos el uno al otro para entibiarnos los pies y podernos parar cuando la tempestad arrecia y nos desequilibra el timón.
Este vínculo ha sido el escenario perfecto para sacar a luz nuestros dones, lo mejor de nosotros.
Hemos sabido darnos sin límite, por el otro y su entorno, sin miramientos ni mesquindades. Hemos aprendido a conversar y escuchar, generando espacios ausentes de amenazas y rencores. Hemos desarrollado el valor de cuidarnos y ser cómplices ante la vida. Somos dos siempre!!!!
Hemos cultivado el humor y nos reímos de buena gana y de manera muy frecuente.
También gozamos nuestros espacios con muy buena comida y un buen vino, obvio que Chileno.
Hemos aprendido a agradecer día a día por lo afortunados que somos de habernos reconocido y creído que esto podía tener forma en un futuro. Requirió de espera y de paciencia, pero finalmente tomó rumbo y pudimos armar nuestro hogar.
He disfrutado del vínculo maduro que se ha ido desarrollando con mis hijos. En donde nos disfrutamos mutuamente sin culpas y sin deudas. Aprovechamos los espacios juntos y sabemos llegar al fondo del alma para que la conversa no sea fatua. Hemos aprendido a practicar el desapego y el afecto seguro. Cuentan conmigo y si no es en cuerpo presente, skype puede ser un muy buen vehículo de contacto. También saben que en cualquier minuto puedo tomar un avión y estar junto a ellos si así lo requieren.
Tengo una buena calidad de vida, hago lo que me viene en ganas y disfruto cada segundo de mi existencia, gozando con cada centímetro de mi día.......sea aquí o allá......en esta peculiar manera de vivir.
Hay que saber ganar y saber perder y para ello es necesario estar muy centrado y con un buen equilibrio personal.
En mi vida he tenido que tomar duras decisiones; una de ellas es vivir fuera de mi país, de mis raíces, mis afectos y mi historia. Difícil opción el irse atrás del hombre que amo y construir un hogar en donde no te conoce ni el gato.
En el camino he aprendido que el hogar es el lugar que uno habita y que está en uno generar los espacios cálidos que se precisan para que el día a día sea satisfactorio.
También he aprendido a confiar que lo que construí alguna vez, no se destruye por el hecho de no estar físicamente presente. Este es el concepto de permanencia de objeto que lo tenemos desde muy pequeños. Sin embargo, a veces nos inundamos de esos pensamientos raros que nos llevan a sentir que los otros dejan de hacernos espacio en sus vidas por el hecho de no estar en cuerpo presentes.
Lo más difícil es estar lejos de mis cuatro amores, mis hijos. Es así que cada mes tomo el avión y vuelo a estar con ellos!!!!! Me he dado cuenta que no pueden pasar más de veinte días sin verlos ya que comienzo a inundarme de un sentimiento de angustia y "saudades" que me quitan la respiración.
Pero, también he aprendido a estar muy presente cada día, no me lo paso pensando en estar del otro lado de la cordillera, todo lo contrario, me vivo el día a día intensamente y sacando el mayor provecho posible a este lado.
También extraño a mi familia de origen, a mi viejo querido y mis hermanos........Con mi hermana tenemos una relación de mellizas, de esas sin palabras, que dan para otra entrada de blog.
Mis amigas son todo un tema.......las de aquí y las de allá, son entrañables, son hermanas en la vida y hacen que mi existencia sea multicolor. Le ponen la sal y la pimienta al diario vivir. Tanto aquí como allá generamos esos encuentros femeninos que nos hacen reconocernos y disfrutarnos como solo las mujeres sabemos hacerlo.
Esta peculiar manera de vivir, el porque vivo en dos lugares. es por la vivencia de haberme topado con mi alma gemela en esta existencia es lo que me ha llevado a renunciar hechar raíces en mi patria.
Cuando me preguntan porqué vivo en Montevideo, les digo "por amor".......y es así de simple y claro.
Decidí venirme por lo que este hombre despertó en mi el día que lo conocí. Al mirarnos sabíamos que esto era potente, sutil, mágico y eterno. También sabíamos que tendríamos que sortear muchas aguas para llegar a puerto y nadie nos dijo que sería fácil. Pero, sentía que valía la pena, que había que jugársela y aquí estoy.
Han pasado casi 8 años desde que nos conocimos. Ya son 5 años de feliz matrimonio y 2 años desde que estoy más tiempo instalada en su patria.
Puedo afirmar, con total certeza que mi decisión fue acertada y que la vida se ha encargado de afianzar y nutrir este vínculo para beneficio de la familia completa. Nuestros 8 hijos tienen mejores padres, seres más felices y plenos, que tienen su propia vida y no somos carga afectiva para ellos.
Somos un mejor ejemplo de seres humanos, conectados con nuestro sentir y gozando la vida, aunque a veces el sol se esconda y el frío inunda nuestras almas. Nos tenemos el uno al otro para entibiarnos los pies y podernos parar cuando la tempestad arrecia y nos desequilibra el timón.
Este vínculo ha sido el escenario perfecto para sacar a luz nuestros dones, lo mejor de nosotros.
Hemos sabido darnos sin límite, por el otro y su entorno, sin miramientos ni mesquindades. Hemos aprendido a conversar y escuchar, generando espacios ausentes de amenazas y rencores. Hemos desarrollado el valor de cuidarnos y ser cómplices ante la vida. Somos dos siempre!!!!
Hemos cultivado el humor y nos reímos de buena gana y de manera muy frecuente.
También gozamos nuestros espacios con muy buena comida y un buen vino, obvio que Chileno.
Hemos aprendido a agradecer día a día por lo afortunados que somos de habernos reconocido y creído que esto podía tener forma en un futuro. Requirió de espera y de paciencia, pero finalmente tomó rumbo y pudimos armar nuestro hogar.
He disfrutado del vínculo maduro que se ha ido desarrollando con mis hijos. En donde nos disfrutamos mutuamente sin culpas y sin deudas. Aprovechamos los espacios juntos y sabemos llegar al fondo del alma para que la conversa no sea fatua. Hemos aprendido a practicar el desapego y el afecto seguro. Cuentan conmigo y si no es en cuerpo presente, skype puede ser un muy buen vehículo de contacto. También saben que en cualquier minuto puedo tomar un avión y estar junto a ellos si así lo requieren.
Tengo una buena calidad de vida, hago lo que me viene en ganas y disfruto cada segundo de mi existencia, gozando con cada centímetro de mi día.......sea aquí o allá......en esta peculiar manera de vivir.
miércoles, octubre 22, 2014
Descolgarse
"Cuantas cosas pasan en la selva!!!!" exclamó el mono, montado en la rama más alta.
Abajo, la familia de elefantes caminaba lentamente en fila por entre los árboles al son de la canción que todos tarareaban; en tanto, el tigre, recostado en la roca, miraba con gesto de aburrido mientras espantaba las moscas.
De pronto se escuchó lo que dijo el león y todos callaron. El único que no entendió la consigna fue el mono. No la comprendió del todo y decidió seguir en la propia, no haciéndose parte del nuevo status.
El león, como buen dictador, determinó las nuevas reglas de convivencia. Cómo debes caminar y por donde hay que hacerlo, dependiendo de tu rango. Entregó los nuevos códigos, mucho más estrictos que los anteriores, dado algunas subversiones.
Monito siguió su tarareo y no se le movió un solo pelo con las palabras del rey.
saltó al árbol vecino, tomó unas cuantas avellanas y continuó descolgándose de rama en rama hasta alcanzar el río. Cruzó montado en un cocodrilo hasta la orilla en donde habita el mandril.
Le comentó que había hablado el león y que todos se parecían obedientes y ocupados pero que él no entendió nada y que tampoco le interesaba saberlo.
"Mientras más entiendo, menos feliz me encuentro.Voy a dejar que otros piensen y hagan, yo no nací para aquello, veré la manera de no tener problemas con el león, pero ni habalr de entenderle lo que quiere decir, esas son palabras mayores que atormentan mi alma; que otros se encarguen de lo serio, yo coloco la música"
El mandril le acarició, amorosamente, el cráneo y le dijo, " Ya bastante haces al no entrar en el juego reglado. Eres el oxígeno que necesitamos para no caer en el desespero, la apatía y el sin sentido. Continúa saltando, cantando y brincando que al mirarte entendemos de que está hecha la vida. Lo que si, no desesperes al león para que continúe pensando que lo importante radica en él."
Abajo, la familia de elefantes caminaba lentamente en fila por entre los árboles al son de la canción que todos tarareaban; en tanto, el tigre, recostado en la roca, miraba con gesto de aburrido mientras espantaba las moscas.
De pronto se escuchó lo que dijo el león y todos callaron. El único que no entendió la consigna fue el mono. No la comprendió del todo y decidió seguir en la propia, no haciéndose parte del nuevo status.
El león, como buen dictador, determinó las nuevas reglas de convivencia. Cómo debes caminar y por donde hay que hacerlo, dependiendo de tu rango. Entregó los nuevos códigos, mucho más estrictos que los anteriores, dado algunas subversiones.
Monito siguió su tarareo y no se le movió un solo pelo con las palabras del rey.
saltó al árbol vecino, tomó unas cuantas avellanas y continuó descolgándose de rama en rama hasta alcanzar el río. Cruzó montado en un cocodrilo hasta la orilla en donde habita el mandril.
Le comentó que había hablado el león y que todos se parecían obedientes y ocupados pero que él no entendió nada y que tampoco le interesaba saberlo.
"Mientras más entiendo, menos feliz me encuentro.Voy a dejar que otros piensen y hagan, yo no nací para aquello, veré la manera de no tener problemas con el león, pero ni habalr de entenderle lo que quiere decir, esas son palabras mayores que atormentan mi alma; que otros se encarguen de lo serio, yo coloco la música"
El mandril le acarició, amorosamente, el cráneo y le dijo, " Ya bastante haces al no entrar en el juego reglado. Eres el oxígeno que necesitamos para no caer en el desespero, la apatía y el sin sentido. Continúa saltando, cantando y brincando que al mirarte entendemos de que está hecha la vida. Lo que si, no desesperes al león para que continúe pensando que lo importante radica en él."
lunes, octubre 20, 2014
Elecciones en Uruguay
Me tiene muy bien impresionada este país.
Durante el fin de semana se llevaron a cabo diferentes actos y marchas, dado que era el último fin de semana antes de las elecciones presidenciales. Me toco pasar varias veces por la rambla, encontrándome con los diferentes grupos políticos haciendo propaganda, entregando panfletos y animando a la gente con canciones alusivas a los diferentes candidatos.
En esta rambla coexisten diferentes grupos humanos, que reflejan la heterogeneidad de este pueblo. hay gente adinerada, otros pobres, hay gente blanca, otros de color, hay viejos y jóvenes, hay deportistas y ancianos caminando, hay seres tomando sol y otros que pasan raudos en bicicleta. Hay de todo!!!!
Toda esta heterogeneidad, propia de un pais democrático, se vió invadida por los distintos grupos políticos tratando de motivarlos a votar por Blancos, Rojos o Frente Amplio.
Que es lo maravilloso y sorprendente?
Todos estaban en la rambla al mismo tiempo!!!!! Nunca vi que se agredieran ni se descalificaran entre si!!!!!!! Nunca vi a nadie rompiendo las pancartas del rival!!!!! Todos estaban en la rambla motivando, pero nadie destruyendo al adversario!!!!!
Este pueblo tiene cultura cívica. Este pueblo sabe dar espacio a cada cual y respetar al que piensa diferente y eso no es menor!!!!
A través de estas líneas, hago un homenaje al pueblo Uruguayo por darnos un ejemplo de civilidad a países que parecen más desarrollados, pero que, en el fondo, nos queda mucho camino por recorrer para llegar a donde ustedes están.
Arriba Uruguay y que el próximo domingo gane el grupo que merezca gobernar esta tierra de gente civilizada y con mucho mayor cultura que todos sus vecinos de América del Sur!!!!!!
Durante el fin de semana se llevaron a cabo diferentes actos y marchas, dado que era el último fin de semana antes de las elecciones presidenciales. Me toco pasar varias veces por la rambla, encontrándome con los diferentes grupos políticos haciendo propaganda, entregando panfletos y animando a la gente con canciones alusivas a los diferentes candidatos.
En esta rambla coexisten diferentes grupos humanos, que reflejan la heterogeneidad de este pueblo. hay gente adinerada, otros pobres, hay gente blanca, otros de color, hay viejos y jóvenes, hay deportistas y ancianos caminando, hay seres tomando sol y otros que pasan raudos en bicicleta. Hay de todo!!!!
Toda esta heterogeneidad, propia de un pais democrático, se vió invadida por los distintos grupos políticos tratando de motivarlos a votar por Blancos, Rojos o Frente Amplio.
Que es lo maravilloso y sorprendente?
Todos estaban en la rambla al mismo tiempo!!!!! Nunca vi que se agredieran ni se descalificaran entre si!!!!!!! Nunca vi a nadie rompiendo las pancartas del rival!!!!! Todos estaban en la rambla motivando, pero nadie destruyendo al adversario!!!!!
Este pueblo tiene cultura cívica. Este pueblo sabe dar espacio a cada cual y respetar al que piensa diferente y eso no es menor!!!!
A través de estas líneas, hago un homenaje al pueblo Uruguayo por darnos un ejemplo de civilidad a países que parecen más desarrollados, pero que, en el fondo, nos queda mucho camino por recorrer para llegar a donde ustedes están.
Arriba Uruguay y que el próximo domingo gane el grupo que merezca gobernar esta tierra de gente civilizada y con mucho mayor cultura que todos sus vecinos de América del Sur!!!!!!
jueves, octubre 16, 2014
Jugando A Ser Niña (0 grande?)
En el campo hacíamos un circuito de bicicletas en una ciudad imaginaria. Había carreteras, peaje, farmacia, almacén, estación de servicio y casas. Cada habitación de la casa, era el departamento de una de nosotras. Nos invitábamos a tomar el té y conversábamos acerca del comportamiento de nuestros hijos (muñecas de diferentes tamaños).
Todos teníamos nuestros roles, unos atendían el almacén, otros el peaje, etc.
El dinero era del Monopoly y el almacén era la despensa de mi madre, que estaba en un gran armario en el lavadero. Vendíamos a través de una ventana que tenía rejas, en donde sacábamos las cosas del armario y las ofrecíamos a los ciclistas.
Era una gran ciudad, la carretera iba desde la casa grande hasta el taller mecánico, incluyendo una bajada que nos parecía la cuesta que llevaba a la capital.
Los hermanos menores atendían la gasolinera y el peaje y los grandes volábamos en nuestras bicicletas por el sendero demarcado con unos álamos gigantescos.
Hoy, cuando tomo la bicicleta para hacer algunos trámites por la ciudad, me viene el cosquilleo de estómago de estar con 9 o 10 años jugando a que era grande. Hoy, de grande, siento que la vida es un juego que no hay que tomárselo muy en serio ni darle aires de gravedad.
Vuelvo a sentir esa levedad de alma que me hace sentir inmensamente feliz.
Me echo al bolso la ciudad y avanzo veloz con mi bici a terminar los mandados del viernes para poder jugar a ser niña el fin de semana que viene.
Todos teníamos nuestros roles, unos atendían el almacén, otros el peaje, etc.
El dinero era del Monopoly y el almacén era la despensa de mi madre, que estaba en un gran armario en el lavadero. Vendíamos a través de una ventana que tenía rejas, en donde sacábamos las cosas del armario y las ofrecíamos a los ciclistas.
Era una gran ciudad, la carretera iba desde la casa grande hasta el taller mecánico, incluyendo una bajada que nos parecía la cuesta que llevaba a la capital.
Los hermanos menores atendían la gasolinera y el peaje y los grandes volábamos en nuestras bicicletas por el sendero demarcado con unos álamos gigantescos.
Hoy, cuando tomo la bicicleta para hacer algunos trámites por la ciudad, me viene el cosquilleo de estómago de estar con 9 o 10 años jugando a que era grande. Hoy, de grande, siento que la vida es un juego que no hay que tomárselo muy en serio ni darle aires de gravedad.
Vuelvo a sentir esa levedad de alma que me hace sentir inmensamente feliz.
Me echo al bolso la ciudad y avanzo veloz con mi bici a terminar los mandados del viernes para poder jugar a ser niña el fin de semana que viene.
miércoles, octubre 15, 2014
Casa Del Norte
La tarde se tornaba calurosa y seca. El clima del norte, del desierto atacameño es así. Dormir la siesta es lo habitual, para volver a las actividades diarias cerca de la puesta del sol.
La casa de adobe se agradece, con sus cuartos frescos y silenciosos que permiten un descanso reparador.
El reloj marca las tres de la tarde, no corre brisa alguna, se siente un silencio pesado, abrazador. De pronto comienzo a percibir un ruido subterráneo, un leve movimiento me despierta del todo. La madera comienza a quejarse y los vidrios a tintinear. Me levanto de prisa y al incorporarme comienzo a tambalear. La tierra se mueve como culebra, todo va a parar al suelo y no hay nada que se resista al movimiento ondulante que nos acompaña.
Logro alcanzar la puerta de calle, intento abrirla y veo que está trabada. Al parecer cedió la pared y ahora quedó aprisionada entre sus muros.
El ruido es infernal, no hay nada en su lugar y no logro mantenerme de pié. Comienzo a gatear hasta la otra punta de la sala, en donde está la puerta trasera que da al patio del parrón. Logro abrir la puerta y vislumbro, entre el polvo, que el parrón está en el suelo, la parra desmayada con todos sus racimos esparcidos por el patio. Yacía como muerta la pobre parra que creció con todos nosotros y fue cómplice de todas las fiestas familiares que se hicieron bajo su sombra.
El movimiento continua, parece eterno. Siguen cayendo cosas a mi alrededor y yo no logro incorporarme. Me acerco al tronco central de la parra que esta a unos cinco metros de la salida y decido quedarme ahí contemplando el apocalipsis a mi alrededor. En ese momento pensé que esto era acabo de mundo. Que nos íriamos la parra y yo al mismo tiempo.
Crecimos juntas, nos vamos juntas.
Se me cruzaron mil imágenes de hechos vividos en esa casa. La gente con la que compartí en ese patio y cómo se fue transformando con los años.
Recuerdo mis primeros amores y las fiestas que se hicieron en la época del toque de queda, impuesto por la dictadura militar. Bailábamos con desenfreno al son de "Los Iracundos", grupo musical, que nos hacía la vida muy divertida y las noches traspiradas de sudor y calores hormonales.
El primer beso fue bajo la parra, un beso experimental que me dejó mas sensación de asco que de placer. No entendía cómo podía ser placentero recibir la enorme lengua, de otro ser, dentro de mi pequeña boca! Lo único placentero fue, sentirme adulta del todo. Ya sabía lo que eran "los besos con lengua" eso marcaba un antes y un después en la vida de cualquier jovencita de la época.
El ruido y el movimiento comenzaron a ceder y dieron paso a una polvareda siniestra que no dejaba ver a mas de dos metros. En ese momento reaccioné que la vida continuaba y el acabo de mundo no era tal. Logré incorporarme, de pié pude percatarme del desastre por doquier. Todo estaba en el suelo y cubierto de un color café, por la tierra que se levantó.
Se escuchaban ruidos en las casas vecinas y uno que otro objeto, volvía a acomodarse luego de la gran sacudida.
Logré abrir la reja trasera de casa y salir a la calle, todo era desorden y caos, los perros ladraban asustados y los vecinos tenían cara de haber visto un fantasma. Nos reunimos todos en la calle, cada cual contaba su experiencia de lo vivido y parecía que hacían competencia de quien había tenido mas pérdidas en sus hogares. La verdad es que no quedó vidrio sin quebrarse y vajilla en pié.
Nuevamente será necesario reponer todo y el hipermercado se verá favorecido con las pérdidas nuestras.
Lo claro es que nadie falleció que la vida continúa y seguiremos sin hablarnos con nuestros vecinos hasta el próximo remezón.
¿De que magnitud tienen que ser los remezones en nuestras vidas para que algo de ellas cambie?
La casa de adobe se agradece, con sus cuartos frescos y silenciosos que permiten un descanso reparador.
El reloj marca las tres de la tarde, no corre brisa alguna, se siente un silencio pesado, abrazador. De pronto comienzo a percibir un ruido subterráneo, un leve movimiento me despierta del todo. La madera comienza a quejarse y los vidrios a tintinear. Me levanto de prisa y al incorporarme comienzo a tambalear. La tierra se mueve como culebra, todo va a parar al suelo y no hay nada que se resista al movimiento ondulante que nos acompaña.
Logro alcanzar la puerta de calle, intento abrirla y veo que está trabada. Al parecer cedió la pared y ahora quedó aprisionada entre sus muros.
El ruido es infernal, no hay nada en su lugar y no logro mantenerme de pié. Comienzo a gatear hasta la otra punta de la sala, en donde está la puerta trasera que da al patio del parrón. Logro abrir la puerta y vislumbro, entre el polvo, que el parrón está en el suelo, la parra desmayada con todos sus racimos esparcidos por el patio. Yacía como muerta la pobre parra que creció con todos nosotros y fue cómplice de todas las fiestas familiares que se hicieron bajo su sombra.
El movimiento continua, parece eterno. Siguen cayendo cosas a mi alrededor y yo no logro incorporarme. Me acerco al tronco central de la parra que esta a unos cinco metros de la salida y decido quedarme ahí contemplando el apocalipsis a mi alrededor. En ese momento pensé que esto era acabo de mundo. Que nos íriamos la parra y yo al mismo tiempo.
Crecimos juntas, nos vamos juntas.
Se me cruzaron mil imágenes de hechos vividos en esa casa. La gente con la que compartí en ese patio y cómo se fue transformando con los años.
Recuerdo mis primeros amores y las fiestas que se hicieron en la época del toque de queda, impuesto por la dictadura militar. Bailábamos con desenfreno al son de "Los Iracundos", grupo musical, que nos hacía la vida muy divertida y las noches traspiradas de sudor y calores hormonales.
El primer beso fue bajo la parra, un beso experimental que me dejó mas sensación de asco que de placer. No entendía cómo podía ser placentero recibir la enorme lengua, de otro ser, dentro de mi pequeña boca! Lo único placentero fue, sentirme adulta del todo. Ya sabía lo que eran "los besos con lengua" eso marcaba un antes y un después en la vida de cualquier jovencita de la época.
El ruido y el movimiento comenzaron a ceder y dieron paso a una polvareda siniestra que no dejaba ver a mas de dos metros. En ese momento reaccioné que la vida continuaba y el acabo de mundo no era tal. Logré incorporarme, de pié pude percatarme del desastre por doquier. Todo estaba en el suelo y cubierto de un color café, por la tierra que se levantó.
Se escuchaban ruidos en las casas vecinas y uno que otro objeto, volvía a acomodarse luego de la gran sacudida.
Logré abrir la reja trasera de casa y salir a la calle, todo era desorden y caos, los perros ladraban asustados y los vecinos tenían cara de haber visto un fantasma. Nos reunimos todos en la calle, cada cual contaba su experiencia de lo vivido y parecía que hacían competencia de quien había tenido mas pérdidas en sus hogares. La verdad es que no quedó vidrio sin quebrarse y vajilla en pié.
Nuevamente será necesario reponer todo y el hipermercado se verá favorecido con las pérdidas nuestras.
Lo claro es que nadie falleció que la vida continúa y seguiremos sin hablarnos con nuestros vecinos hasta el próximo remezón.
¿De que magnitud tienen que ser los remezones en nuestras vidas para que algo de ellas cambie?
Suscribirse a:
Entradas (Atom)