Llegar a Shanghai ha sido una experiencia muy fuerte.
Nos recibe un cielo gris, a las 17:30 hrs de un día de Marzo en que está prácticamente de noche.
En el aeropuerto nos espera un cartel con el nombre de mi marido, en manos de un chino sonriente.
Lo saludo en Inglés y solo se sonríe. Ahi me doy cuenta que no entiende inglés. Agarra nuestras maletas y nos vamos hacia el estacionamiento. Subimos al auto, a pura sonrisa y nos vamos raudos a la ciudad. Ni una sola palabra de camino........él solo habla por teléfono y me baja ataque de risa al ver que no le entiendo absolutamente nada.
Llegamos al hotel, nos dan la habitación y me doy cuenta que en el closet no existe la profundidad para que entre un colgador!!!!! Hay que ponerlos de lado!!!! Tampoco hay estantes o cómoda para guardar el resto de la ropa. Finalmente queda todo en los cajones de los veladores. Y es un hotel 5 stars!!!!
Al día siguiente salgo a caminar y voy a la Nanjing road, calle comercial tipo Providencia, con un tramo peatonal. Las tiendas son tipo NY, de un nivel y despliegue increíble. Me salgo media cuadra de esa calle y se ve un panorama lúgubre y decadente. Es todo para el business y el Show off, ya que el portón que vi abierto era lamentable.......sucio, desordenado, muebles arrumbados, frazadas en el suelo y gente durmiendo entre cojines y camas improvisadas. Un par de gatos vigilando la entrada y un olor que te tira de espalda.
Es una ciudad de contrastes, de muchas luces y glamour acompañadas de gritos y escupos por doquier. y ojo con cruzar la calle confiando en que te dieron la luz verde......craso error.....las bicicletas y las motos eléctricas no respetan las señales y pasan raudos entre los peatones tratando de cruzar entre hordas de miles de personas.
Te puedes encontrar con una mujer lujosamente vestida haciendo gárgaras con los mocos y escupiendo al lado tuyo. Yo que soy asquenta esto me genera arcadas que me hacen imposible que no me vengan ganas de vomitar.
Me fui a caminar al Bund, lugar junto al río que tiene una vista hacia Pudong que es la típica de las postales de Shanghai........la verdad que muy lindo y te da la sensación de estar mirando Manhattan.
De noche salimos a cenar, también en el sector del Bund. Hay un edificio gastronómico en que cada piso tiene un restaurant mejor que el otro, se llama "Three on the Bund" Uno Italiano, el Mercator, uno contemporáneo, el POP, uno Francés, etc etc......todos de muy buen nivel y con una onda muy entretenida. Es el lugar donde he visto la mayor concentración de gente occidental. El nivel gastronómico de esta ciudad está a nivel de Sao Paulo, lo que es mucho decir. Y a nosotros que nos gusta esto, ha sido un placer descubrir estos lugares de buen comer!!!!!
Ayer entramos a un mall recién inaugurado, en Nanjing road, de Altísimo Padrón!!!!, tan alto que nada de lo que venden es comprable por nuestros bolsillos. Una polerita de manga corta, con onda, pero simple, vale $100 u.s. Esto me hace pensar que el poder adquisitivo de un montón de gente aqui es algo fuera de lo común........hay mucha gente muy rica!!!!!
De hecho en nuestra pasada por Paris, me impactó la cantidad de mujeres orientales haciendo fila en louis Vuitton para entrar a comprar. Daba la impresión que las carteras estaban a dolar cada una.
Hasta hace pocos años, se pensaba que China era sinónimo de barato.......hoy ese concepto está obsoleto.....los precios están mas altos que en Europa!!!!! Cotizamos una maleta Saxoline en Paris que costaba $240 Euros.........acá, la misma está a $500 dólares........y pensar que nos parecía ridículo comprarla en Paris cuando veníamos de camino a China, el reino de la baratura.
Otro concepto que quedó obsoleto es que las Chinas no se visten bien.........Están de una onda occidental increíble!!!!!! A la última moda!!!!! y muy atrevidas en sus atuendos, su pelo, su maquillaje y accesorios.......Claramente es un mercado que está creciendo de manera exponencial.
Este país se está poniendo muy occidental, nos están copiando el consumismo malamente.......nosotros tratando de arrancar de aquellas garras de superficialidad y ellos matándose por entrar lo mas rápido posible.........Se pueden morir las filas que hay para entrar al Palacio de la Manzana (Apple store) y no hay Chino que no ande luciendo su Smartphone grande brillante y 6.
Todavía no me encuentro con esa sabiduría profunda, con ese espacio Zen de silencio y reflexión......no se aún si lo voy a encontrar.......en los próximos días y tal vez en alguna ciudad más pequeña al interior. Lo único que he visto en esa línea es un montón de gente en una plaza, frente a mi ventana del hotel,haciendo Thai Chi a las 7 de la mañana. La mayoría personas mayores.
Algo sumamente rescatable y que es un agrado, es que puedes caminar a cualquier hora por la calle y no sientes miedo......no pasa nada y puedes andar super tranquilo por la calle. Claro que nadie sale hasta muy tarde, aqui, la vida noscturna es hasta muy temprano. A las 11 apagan las luces de neón y la fiesta se acaba. Si miras por la ventana a las 12 de la noche se ve muy poca gente caminando por las calles.
Si llegas a un restaurant a comer después de las 22 hrs, en muchos ya no te reciben. De hecho la hora pick es a las 20;00 hrs. Esto para mi es un agrado ya que no soy pájaro nocturno.
El almuerzo es a las 13;00, a las 14;00 comes con muy poca gente dentro del restaurant. De hecho en uno nos paramos a las 14;30 y fuimos los últimos, nos estaban esperando que saliéramos para hacer aseo.
Estar en un lugar con códigos tan diferentes y tan lejos de casa me ha generado algo de vértigo. Me acompaña una sensación de inseguridad o tal vez, fragilidad....... no se, algo raro que me cuesta definir pero que no me hace sentir cómoda. Tal vez hay algo lindo que aprender en este escenario con pocos referentes.............veremos.......
1 comentario:
Gracias por transmitir tus sensaciones. Me imagino que debe ser muy distinto de otros sitios del sudeste asiático, que es donde me gustaría ir, besos
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