martes, diciembre 27, 2005

Balance Anual

Cuando cerramos el año laboral, viene el momento de las evaluaciones. Lo que hice y dejé de hacer. Cuanto empeño le puse y como veo yo y ven los demás el trabajo realizado. En este escenario, recorrer el año se hace difícil. Tanto camino recorrido me hace pensar que para el próximo debiera llevar una bitácora que me permita traer a diciembre todos los eventos significativos y poder evaluarlos. Muchas de las cosas que sucedieron quedaron en el cajón del olvido y me cuesta rememorar eventos para poder evaluarlos. Tengo la sensación general que fué un año muy duro en el aspecto emocional. Sin embargo, mi labor profesional la cumplí a pesar del cansancio y la desmotivación sentida en algunos momentos. Es difícil desligar lo profesional del contexto privado y personal. Todo está interrelacionado y no es fácil objetivar a estas alturas del año. Mi caminar es uno solo, es todo mi ser en todo momento, aquí y ahora. Tengo un "deber ser " del porte de una catedral y este me llevó a no abandonar el trabajo, a pesar de mi quiebre sentimental. Tal vez es lo que me salvó para seguir luchando, levantar la cabeza, ponerme de pié y seguir dándole a la vida. El trabajo con niños es muy estimulante y ellos, te obligan a estar bien. Trasmiten una energía maravillosa que hace buscar el lado lindo de la vida y las ganas de superarte para no fallarles. Fué un año de mucho aprendizaje, de crecimiento y de poder tocar fielmente las fuerzas con las que cuento para vivir. Gracias a la vida que me da tanto para poder ser cada día mejor......

miércoles, diciembre 07, 2005

Actitud Navideña

Diciembre es un mes complejo, lleno de actividades, de compromisos, de apuro, de agobio, de regalo, de elecciones, de graduaciones, de eventos. ¿Cómo tener una actitud positiva, abierta, complaciente y armónica ante tanta presión? Mantener la calma, el centramiento y la paz interior en este torbellino, no es fácil. Quiero hacerme el propósito de vivir este diciembre 2005, desde un lugar interno diferente. Desde la paz y la tranquilidad., no dejándome llevar por la presión externa ni por el cúmulo de estímulos que me acompañan. Me propongo respirar profundo, andar con calma y abrigar el sentimiento maravilloso de que este año ha sido pleno en regalos para el alma. Tengo salud, amor, amistades, familia, trabajo, armonía, humor, proyectos, sueños, etc.... Estoy profundamente agradecida con la vida y no quiero perder de vista todos estos dones, deseo atesorarlos en mi corazón. Cuando esté en una fila del supermercado o en un taco, en la calle, aprovecharé ese momento para recorrer los momentos vividos este año y agradecer el estar viva y con ganas de seguir pasándola bien. Soy mucho más que todo lo que pasa a mi alrededor y quiero permanecer conectada a eso profundo que está en mi interior que me permite no agobiarme con la cotidianeidad. Respirar profundo permite abrir la puerta a esa conciencia más amplia y conectar con la trascendencia de la vida. Nada tiene sentido si no lo respiro desde lo profundo. Todo tiene sentido si lo vivo desde el amor que siento en mi corazón. "Desapego" y "Totalidad" dos grandes maestros que permiten vivir desde la conciencia profundo, desde nuestra divinidad interior. Expande tus fronteras, mira más allá de la materia y cuélate por aquellos espacios que se dan entre los objetos, pasa a través de ellos buscando el significado profundo de tu caminar por esta existencia.